Durante los últimos años, los complementos de los dispositivos electrónicos han evolucionado a pasos agigantados. A pesar de ello, su autonomía de uso sigue sin ser suficiente para la era tecnológica en la que nos encontramos, en la que se demanda una resistencia de carga de, al menos, un día completo. El equipo de Comunidad Jazztel ya escribió un artículo contando algunos tips útiles para ahorrar energía.
No obstante, dentro de poco tiempo no harán falta trucos. Así lo confirma un artículo que ha publicado la revista Science, una de las pioneras a nivel mundial en cuanto a divulgación de estudios científicos. Según informa el medio estadounidense, un grupo de investigadores está poniendo a prueba las propiedades del fluoruro, un material capaz de acumular mucha más energía que las baterías de litio actuales.
A continuación te contamos éste y otros avances en el campo de la tecnología que ya están disponibles o que saldrán a la luz próximamente.
El fluoruro es un elemento aplicado como elemento energético. Este hace que un acumulador dure hasta ocho veces más que los actuales generadores, lo que supone un gran avance tecnológico.
En lo referente al estudio que ha publicado Science, los responsables de la investigación han logrado que los iones negativos del fluoruro funcionen con normalidad en elementos líquidos. A pesar de encontrarse en las primeras etapas de desarrollo, los investigadores del proyecto han creado la primera batería recargable de este material que, además, es capaz de almacenar diez veces más energía que una equivalente de litio.
La batería desarrollada también tiene la ventaja de que no se sobrecalienta como las actuales y que, al no usar este componente ni cobalto, es más beneficiosa para el medioambiente. La clave está en utilizar un líquido químicamente estable, basado en fluoruro, que a su vez hace de electrolito. Por desgracia, esta aplicación no es inmediata, y tendremos que esperar algunos años para poder disfrutar de ella.
¿Un teléfono que se dobla por la mitad? Hoy en día sí es posible. Los primeros smartphones plegables que salieron a la luz tenían incorporada la tecnología OLED flexible, también conocida como FOLED. Este tipo de pantallas incorpora un sustrato especial formado por un plástico flexible sobre el que se deposita un semiconductor orgánico electroluminiscente.
A consecuencia de esa incorporación, la pantalla puede doblarse o incluso enrollarse mientras el dispositivo sigue iluminado y funcionando. Como ya sabréis, compañías conocidas como Samsung han lanzado al mercado prototipos como el Galaxy Fold. Aunque por el momento son sólo eso, prototipos, pronto saldrán a la venta y podremos hacernos con uno de ellos.
A cada paso tecnológico que damos tenemos la necesidad de mejorar nuestra experiencia con los dispositivos electrónicos. Esto ocurre también con la velocidad de conexión.
Afortunadamente, estamos muy cerca de tener entre nuestras manos una conexión más veloz de la historia: el 5G. Esta incorporación supondría una velocidad de uso que superaría con creces al actual 4G y que nos permitiría enviar mensajes, realizar llamadas y hacer búsquedas en internet más rápido que nunca.
La innovadora conexión funcionará a 10 GB por segundo, lo que supondría que podríamos descargar una película completa en calidad HD en cuestión de segundos.
Por mucho que nos cueste asumirlo, actualmente tenemos la posibilidad de cargar nuestros dispositivos sin necesidad de enchufarlos a la red eléctrica. Esto sucede gracias a la energía solar.
La parte negativa de este avance tecnológico es la cantidad de batería que almacena, que en este caso es bastante limitada. Sin embargo, los cargadores solares resultan muy útiles para llevarlos en el bolso o la mochila y usarlos para emergencias. Eso sí, mejor hacerlo al aire libre y con el día soleado, así nuestro dispositivo podrá cargarse mediante USB gracias a la energía solar que ha absorbido la batería portátil.
Por Tatiana Ojeda Bermúdez
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