El consumo de energía. Una de las características que investigamos con más detalle cuando queremos hacernos con un teléfono nuevo. No hay nada que produzca más satisfacción tras una compra que tener el móvil operativo durante todo el día y parte del siguiente sin que se agote la batería
Por otro lado, cargar constantemente el terminal es uno de los aspectos que más nos inquieta cuando nuestro querido aparato ya tiene unos añitos. En ese momento nos planteamos si cambiar la batería o intentar sacarle su máximo rendimiento.
En cualquier caso, no te preocupes, desde la Comunidad Jazztel hemos recopilado los trucos más efectivos para que tu smartphone dure lo máximo posible. O al menos su energía.
Adiós a la ubicación (al menos cuando no la usemos)
Si hay algo que debilita el rendimiento de un terminal es la señal GPS. En las versiones más antiguas de Android e iOS, dicha señal se mantenía encendida siempre que no se desconectara manualmente.
En la actualidad existe la opción de que se active automáticamente con el uso de las aplicaciones que lo requieran y sólo si la misma app está en funcionamiento. Aún así, nunca está de más ser precavidos y estar alerta para que esta función del dispositivo no se mantenga activa sin nuestro previo consentimiento.
Adiós Modo avión ¿Por qué no?
A pesar de ser uno de los métodos más eficientes para el ahorro de energía también es uno de los grandes olvidados. Ha llegado un punto en nuestras vidas en el que sólo activamos esta función cuando nos lo pide la megafonía del propio avión. Parece que solo existe para ello.
No obstante, se trata de una buena alternativa para no gastar batería ya que desconecta las funciones principales del terminal (wifi, bluetooth, llamadas y datos), pero te permite utilizar otras como el reproductor de música o la alarma.
Reduce el tiempo de pantalla encendida
Otro de los consejos más útiles para ahorrar energía es configurar nuestro terminal para que la pantalla se apague tras unos segundos sin utilizarla.
¿Cuántas veces a lo largo del día miras la hora en el móvil? Piensa que, si activas un modo de suspensión de pantalla alargado, como un minuto, por ejemplo, al final de la jornada habrás gastado batería sin ningún tipo de utilidad.
Apaga las conexiones de wifi y bluetooth
Una de las acciones más comunes entre los usuarios de smartphone es dejar activadas las opciones de wifi y bluetooth. Bien sea para que nuestro terminal se conecte automáticamente a internet al llegar a casa o para activar el manos libres al momento cuando montamos en nuestro coche.
Cuando nuestro smartphone es nuevo o tiene poco tiempo, estas costumbres no suponen ningún tipo de inconveniente en lo que a energía se refiere. Por otro lado, lo aconsejable es desactivarlos para que la batería del terminal pueda exprimirse al máximo.
Mejor sonido que vibración
A no ser que lo necesitemos de manera imperiosa, lo más recomendable es desactivar la vibración de nuestro móvil. Incluida, claro está, la vibración del teclado cuando escribimos para cualquier aplicación.
Sabemos que es una función mucho más cómoda que el sonido o el modo silencio, sin embargo, si tu objetivo es alargar la actividad del terminal al máximo lo mejor será prescindir de la vibración.
Cierra las aplicaciones que están en segundo plano
La mayoría de las veces tenemos aplicaciones abiertas en segundo plano y no nos damos cuenta. Esta es una práctica más común de lo que pensamos y, aunque parezcan inofensivas, consumen energía.
Lo más conveniente en este caso es cerrarlas a través de función multitarea de nuestro dispositivo. No es necesario descargar una aplicación que lo haga por nosotros, basta con estar atentos e intentar cerrar las app una vez dejemos de utilizarlas.
Ajusta el brillo de la pantalla
Otra recomendación para ahorrar energía es activar el brillo automático. De este modo será el mismo terminal el que decida cuánta luz emite en función a la claridad natural.
Por otro lado, también valdría hacerlo de forma manual. Aunque la visibilidad sea reducida o peor, agradecerás el consumo mínimo que provocará en tu terminal.
Apaga el teléfono en jornadas de trabajo
A no ser que se trate del teléfono que utilizas para trabajar, nunca está de más apagar nuestro móvil personal durante la jornada laboral. Es un buen método para ahorrar batería y que no consume absolutamente nada. De este modo, cuando lo encendamos de nuevo el porcentaje apenas habrá bajado un par de puntos.
También podemos recurrir a esta simple práctica durante periodos continuados en los que sepamos que no vamos a poder hacer uso de él, como por ejemplo, el cine, una reunión, un concierto o tu momento de desconexión del día.
Por Tatiana Ojeda Bermúdez
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